¿Qué puede hacer el museo por ti?

11 de marzo de 2021

Experiencia en que niñas, niños y niñes entregan una nueva forma de mirar los museos. En ella emergen otras definiciones y otros puntos de vista acerca del bienestar humano, dándonos la oportunidad de reconocer que un nuevo orden siempre es posible.

Autora: Irene de la Jara Morales, encargada del área Educativa de la Subdirección Nacional de Museos

En 1924 la Sociedad de Naciones (SDN), antecesora de la Organización de Naciones Unidas (ONU), adoptó de la Alianza Internacional Save the Children, la Declaración de Ginebra, documento histórico de posguerra que por medio de cinco principios, vino a poner en evidencia la necesidad de proteger a la niñez. Centrados fundamentalmente en aspectos como desarrollo material y espiritual; alimentación; contención emocional; protección; y valores, los principios del texto apuntaban más a los deberes de las personas adultas sobre niñas y niños que a los derechos propiamente. Sin embargo, el manuscrito posee el valor, por una parte, de observar a la niñez como grupo social con necesidades específicas esenciales; y, por otra parte, de reconocer explícitamente la responsabilidad que recae sobre las personas adultas en el resguardo y cumplimiento de esas demandas. El 20 de noviembre de 1959, la Organización de las Naciones Unidas aprobó la Declaración de los Derechos del Niño, misma que en 1989 se convirtió en la Convención sobre los Derechos del Niño, firmada y ratificada por Chile en 1990, en enero y agosto respectivamente.

El año 2019 se cumplieron 30 años de la Convención. Y para los museos −instituciones que desde hace varios años exploran formatos de trabajo para todas las edades, haciendo con ello el reconocimiento tácito de que el patrimonio es un derecho de todas las personas, incluida la infancia−, era importante marcar esa fecha con acciones que relevaran el pensamiento y el sentimiento de niñas, niños y niñes, especialmente porque los ejercicios de mediación no siempre promueven la escucha (aunque paulatinamente se tiende a ello), más bien "se asocian a actividades destinadas a seducir, explicar, entretener al 'público en general' y a los 'públicos cautivos' como los niños de una escuela que son llevados sin mayor poder de objeción" (Mörsch 2015: 1). Lo que aquí se buscaba era explorar las posibles transformaciones del museo en atención a lo que este segmento en particular pudiera sugerir.

En este contexto nació ¿Qué puede hacer el museo por ti?, iniciativa que surgió del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, apoyada por el área Educativa de la Subdirección Nacional de Museos, para conocer desde la voz de la niñez, de qué manera estas instituciones podían contribuir a su bienestar. Se crearon estaciones de trabajo en los distintos espacios museales a lo largo del país para recoger estas opiniones, apelando -aunque fuera mínimamente- a la idea del derecho a la participación, y al mismo tiempo, al reconocimiento de una noción de bienestar que nacía del público (infantil, en este caso) y que no se instalaba imperativamente desde la institución.

Estas estaciones constituyeron verdaderas operaciones museográficas; elementos temporales de la exhibición que bien podrían entenderse como ejercicios museográficos, es decir, acciones que buscan intervenir la muestra permanente con recursos mínimos, reciclando lo existente para probar nuevos temas; para interpelar al público frente a situaciones distintas, incómodas o curiosas; para conocer diferentes tipos de opiniones o para provocar respuestas de carácter más íntimo, como podría ser el ejercicio del que hablamos.

Participaron 20 museos usando palabras, dibujos y audios. Estas narrativas serían sistematizadas y socializadas en un encuentro en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, pero la situación política y social vivida por Chile en octubre de 2019 (estallido social) y luego la pandemia, obligó a las organizaciones a suspender la jornada. Sin embargo, para quienes participaron de la experiencia significó considerar estas opiniones y abrir nuevos espacios para conocer los sentimientos del público infantil.

Las narrativas, expresadas en relatos y dibujos son respuestas sencillas, pero con argumentaciones bastante eficientes, pues niñas, niños y niñes, "inicialmente sostienen sus puntos de vista a través de una estructura circular, con justificaciones basadas en sus sentimientos, para luego comenzar a apelar a reglas sociales y a consecuencias materiales para apoyar sus posiciones" (Migdalek, Santibáñez y Rosemberg 2014: 438). Desde posturas adultocéntricas las argumentaciones de la niñez no siempre son consideradas como tales, sin embargo, creemos que desde esas posiciones, además de invalidar y negar otras voces, las personas pierden también la oportunidad de acercarse a nuevas maneras de entender el mundo, de nombrar las cosas o de definirlas.

Las respuestas permiten reconocer, preliminarmente, tres ideas: la experiencia de la visita, la emoción y lo trascendente. Estos elementos son interesantes no solo desde una perspectiva teórica, sino que revisten también belleza y una profunda honestidad que nos debiera hacer pensar en los museos desde un ángulo todavía más significativo y resiliente.

La experiencia de la visita

Dimensión que considera distintos elementos para mejorar la experiencia de recorrer el museo. Se integran aquí los espacios, las metodologías, los contenidos y la idea de pasado. En torno a los espacios, piden sectores para tocar algunos objetos, hacer colación, descansar, tomar fotografías, hacer concursos de aprendizaje y comprar recuerdos.

Con respecto a las metodologías, solicitan más dibujos en la museografía para entender lo que se explica; entrega de folletos explicativos; más talleres; y comida en el caso de los museos donde se habla de ello: "dar a probar alguna comida mapuche" (Museo Mapuche de Cañete).

Los contenidos dicen relación con las materias específicas o colecciones de los museos. En general, las personas consultadas piden profundizar, especialmente en temas de dinosaurios o culturas antiguas. Esto último es muy importante porque el pasado es un tema de interés; asunto que también se reflejó en los estudios realizados con la niñez (2018 y 2019) en la Subdirección de Museos. Algunas de las ideas señalan:

"mostrar más del hermoso arte antiguo y/o nuevo" Museo de La Ligua.

"cuidar nuestro pasado para que lo vea nuestro futuro" Museo de Historia Natural de Concepción.

"enseñarme cosas que no sabía del pasado" Casa Museo Eduardo Frei.

"cómo eran los mitos y leyendas antiguas" Museo Histórico de Puerto Montt.

La emoción

Esta segunda categoría apela a la experimentación interna y reflexión más íntima; se relaciona con sensaciones o estados de ánimo, así como a derechos o necesidades vinculadas a la idea de estar bien. Algunas de sus palabras, señalan:

"Me puede dar tranquilidad y me puede dar sabiduría" Museo Regional de Ancud.

"darnos el derecho a que nadie nos pegue" Museo de la Educación Gabriela Mistral.

"que enseñen a ser feliz" Museo de Concón.

"para ayudar a los niños deben comprender lo que el niño quiere" Museo del Carmen de Maipú.

"darme suerte" Museo Alberto Hurtado.

"ayudar a surgir nuestros sueños y esperanzas" Museo de Historia Natural de Concepción.

Lo trascendente

Se integran aquí las argumentaciones con significados que superan lo material y lo inmediato, como el juego, por ejemplo, tema que aparece de manera recurrente, incluso asociado a la colección:

"hacer juguetes de todas las esculturas para que los niños jueguen" Museo Ralli de Santiago.

"un refalín histórico" Museo Histórico de Placilla.

"hacer una parte de juegos o entretención" Museo Nacional de Bellas Artes.

"Poner juegos en el patio. Que hayan talleres que enseñen a coser y tejer. Un taller de Derechos del Niño" Museo Histórico y Arqueológico de Concón

Algunas frases también dan cuenta de la relación que quisieran establecer con la historia:

"que permitan tocar o usar los elementos del museo para sentir que somos parte de la historia" Museo Histórico de Yerbas Buenas.

"personas recreando rituales" Museo Mapuche de Cañete.

La vida social con otros niños, niñas y niñes y el cuidado del planeta, aparecen también como una necesidad "limpiar el territorio de los animales" Museo de Historia Natural de Valparaíso.

Esta trascendencia es importante relevarla, pues se visualizan los signos de un altruismo infantil al poner en primer lugar asuntos que afectan a toda la humanidad, lo que echa por tierra antiguas teorías acerca de la amoralidad o incapacidad de niñas, niños y niñes de comprender otros puntos de vista más allá de sus propias necesidades.

Reflexiones finales

Esta consulta no solo nos permite mirar el quehacer de los museos desde una perspectiva distinta, sino que ella misma tiene el poder de transformar la institución en la medida que se consideren las opiniones y anhelos de las infancias. La invitación es a trabajar con la niñez y no solo para la niñez, lo que implica adoptar un enfoque de trabajo que no se reduzca a la realización de acciones aisladas.

Al mismo tiempo, estas respuestas contribuyen a dar un giro en nuestra forma de ver, tratar y escuchar a las infancias pues las generaciones mayores no siempre somos conscientes de las prácticas adultocéntricas que dominan nuestra relación con las generaciones jóvenes.

Finalmente, niñas, niños y niñes nos regalan con dibujos y palabras una nueva forma de mirar los museos. Otras definiciones y otros puntos de vista acerca del bienestar humano, nos aportan la oportunidad de reconocer que un nuevo orden siempre es posible.

Museos participantes

  • Casa Museo Eduardo Frei
  • MAVI
  • Museo Alberto Hurtado
  • Museo de Arte y Artesanía de Linares
  • Museo Histórico y Arqueológico de Concón
  • Museo de Historia Natural de Concepción
  • Museo de Historia Natural de Valparaíso
  • Museo de la Educación Gabriela Mistral
  • Museo de la Ligua
  • Museo de la Memoria y los Derechos Humanos
  • Museo del Carmen de Maipú
  • Museo del Limarí
  • Museo Histórico de Placilla
  • Museo Histórico de Puerto Montt
  • Museo Histórico de Yerbas Buenas
  • Museo Mapuche de Cañete
  • Museo Marítimo Nacional
  • Museo Nacional de Bellas Artes
  • Museo Ralli
  • Museo Regional de Ancud

Galería

Museo de la Memoria y los Derechos Humanos
Museo de Historia Natural de Concepción
Museo de Arte y Artesanía de Linares
Museo Marítimo Nacional
Museo del Limarí
Museo del Carmen de Maipú
Museo Alberto Hurtado
"Contar con un lugar donde puedo tocar las cosas" Museo Histórico de Yerbas Buenas
"Hacer muchas actividades entretenidas" MAVI
"No sabía que antes esto lucía así" Museo Regional de Ancud
"Darnos espacios para jugar" MAVI
"Tener más naturaleza" MAVI
"Darnos paisajes hermosos" MAVI
"Poder jugar adentro como un hámster" MAVI
"Poner juegos en el patio. Que hayan talleres que enseñen a coser y tejer. Un taller de Derechos del Niño" Museo Histórico y Arqueológico de Concón