El Museo Escuela del Títere, nace del oficio del Teatro Tradicional de Títeres, pues su semilla es el Teatro Candelilla, creado y dirigido por Tito Guzmán y Luchita Flores, quienes desde 1958, han desarrollado esta actividad teatral que involucra la fabricación de títeres y escenografías, la creación de la dramaturgia de las obras y su puesta en escena entre otros muchos pasos y que por su valor como oficio patrimonial ha sido destacado con el reconocimiento a Tito Guzmán, de Tesoro Humano Vivo, en 2016.
Con el objetivo de transmitir y difundir este legado, la hija de ambos; Elizabeth Guzmán Flores, titiritera desde la cuna, lidera la fundación el año 2003 de la Escuela de Teatro, Títeres y Folclor Itinerante, que articula la transmisión del oficio, vinculándolo con los derechos de niños y niñas, gracias a una metodología basada en la participación que orienta todos los procesos y acciones que se desarrollan.
La labor de la escuela a través de los años, generó una gran colección de títeres, y la necesidad de crear un espacio que pudiese alojarlas. Es así como el año 2012, gracias a un fondo concursable, el Museo se instala en el Centro de Salud Mental de Lo Espejo, lo que facilita la asistencia de un público diverso, constituido por adultos mayores y niños y niñas con capacidades diferentes además de sus cuidadores.
Así, el Museo Escuela ha fortalecido una programación anual de actividades, que incluye la creación, exhibición, formación y puesta en valor, tanto en el ámbito comunitario como en el específico mundo del oficio de los títeres.
Su vocación Itinerante lo ha llevado a participar en distintos espacios, entre los que destaca: la celebración del día del niño y la niña, en el Estadio Municipal de Lo Espejo (2014); instalación en la Escuela Marcela Paz de Recoleta (2015); exposición de obras en el nombramiento de Tesoro Humano Vivo de Tito Guzmán, en el Palacio de La Moneda (2016); participación en el Festival Internacional de Titiriteros y Juglares, Córdo