Construido en 1911, es un espacio que, con el pasar de los años, se convirtió en uno de los lugares más preciados para los voluntarios de la Compañía, siendo uno de los principales puntos de encuentro para estos, donde se realizaban importantes eventos como la ceremonia de bautizo de los hijos de los bomberos, denominada "Libro Rojo".
Actualmente, el Salón de Honor alberga reliquias históricas como: escritos originales de los tiempos fundacionales, implementos utilizados durante las primeras décadas de la compañía, cuadros de pinturas de algunos socios fundadores y fotografías de otros socios destacados.
