Desde el momento en que se establecieron las bases institucionales que fundamentaron la creación de la Universidad de Concepción, se pensó en la necesidad de contar con un centro que vinculara y difundiera las manifestaciones artísticas en la región. Tímidamente, en sus inicios se adquirieron obras de los distintos artistas que exponían en la ciudad. En 1954 llegó a Concepción, como director y profesor de la Academia Libre de Bellas Artes, el pintor Tole Peralta, quien daría el impulso definitivo para la creación de lo que sería la Pinacoteca de la Universidad de Concepción.
Con el apoyo entusiasta del rector David Stitchkin, inició las gestiones para adquirir la colección del señor Julio Vásquez Cortés, poseedor del más importante conjunto de obras pertenecientes a la Generación del 13. La gestión se concretó en diciembre de 1958, y la valiosa colección de 542 obras, de diversas técnicas e integrada por 40 artistas, pasó a la Universidad, siendo uno de los pilares de esta Pinacoteca. El cuantioso número de obras que conforman la Generación del 13 es el núcleo, que se iría incrementando con un lento y seguro proceso de adquisiciones de artistas chilenos y extranjeros. En 1967, ya convertida en la Pinacoteca de la Universidad de Concepción, se abrió al público en forma permanente, el cual aumentó con el paso del tiempo y divulgó los méritos de esta colección artística.